Verso 1
Tráelo, por favor, que quiero verlo…
A mi Rojito, solo un momento.
No le pongas miedo, él lo entiende,
háblale suave…
Él siempre supo cuándo dolía
y cuándo el alma ya no aguantaba.
Fue mi silencio, mi compañía,
cuando todo se iba...

Verso 2
Y vino él, ciego y tan viejo,
como si viera mi desespero.
Se subió a mi cama, tan ligero,
como en los días buenos.
Rozó mi cara con su ternura,
bebió mis lágrimas sin preguntas.
Su corazón, roto de pena,
ronroneaba vida…

Estribillo
Rojito, mi amor sin palabras,
mi faro en la noche más larga.
No me soltó, no me dejó,
se aferró a mí con su alma.
Y en ese suspiro, en su último abrazo,
me llevó la tristeza y el frío.
Mi guardián fiel, mi último abrigo…
mi Rojito…

Puente
El hijo miraba, sin comprender,
cómo un gato podía entender
la muerte, el adiós, el amor…
mejor que el mundo entero.

Verso 3
El tiempo no quiso moverse,
la noche callaba su canto.
Y Rojito seguía en su puesto,
esperando algo…
Lamió mis párpados sin vida,
como pidiendo que despertara.
Y en su maullido breve y dolido
se rompió el alma…

Estribillo final
Rojito, mi amor sin palabras,
mi luz cuando ya no quedaba.
No me soltó, no me dejó,
se quedó en mi almohada.
Y cuando la aurora lo vio aún allí,
velando mi sombra en la cama,
el hijo entendió lo que es amar…
sin decir nada.

Coda (suave)
Rojito…
mi Rojito…
Hasta el final.
Hasta el final.